El pasado sábado 17 de febrero un equipo interparroquial celebramos  el segundo encuentro de "Formación en clave de renovación evangelizadora". El objetivo de esta formación es trabajar y caminar, en el proceso de madurar en visión y misión para la transformación de nuestras comunidades parroquiales y entre todos HACER CRECER DISCÍPULOS MISIONEROS.

En definitiva, ponernos en actitud renovadora, sintiendo el Espíritu Santo protagonista en nosotros, a fin de tomar como actitud profundamente lograda, la de QUEDARSE y LUCHAR.

En esta sesión, nos acompañó la Sra. Teresa Valero, delegada de Nueva Evangelización del Obispado de Solsona.

Teresa, por un lado nos contó la experiencia de la ruta renovadora que han emprendido en su Diócesis, y el anhelo e interés para preparar una reforma de las estructuras diocesanas y comunidades parroquiales. Compartió también los testimonios de otras comunidades de toda Europa que lo están haciendo.

La jornada tomó un color de cuestionarse cada uno de los participantes. Así pues, nos preguntamos personalmente si somos discípulos misioneros y qué porcentaje de nuestro día dedicamos a la oración, la vida fraterna, el silencio con aroma de Dios, el servicio, el primer anuncio, la lectura de la Palabra, la formación.

Y te lo cuestionas seriamente cuando sientes una persona como Teresa, que habla desde la experiencia de la conversión y desde la vivencia plenamente evangélica ... !!No es teoría!!

Experiencia de Dios haciendo camino conjuntamente, pastor (sacerdote) y equipo de pastoralistas (seglares). Empleando métodos tales como el Curso Alfa, impartiendo cursos parroquiales, creando pequeñas células (grupos) parroquiales en el proceso del Primer Anuncio (con vida orante, vida de enseñanza y vida fraterna), y formando discípulos misioneros, bebiendo de la FUENTE del Espíritu Santo.

Agradezco la propuesta que mi rector me hizo para participar en esta formación, inspirados por la experiencia del Padre James Mallon (leemos y trabajamos su libro) y también por la de otras comunidades que ya vienen trabajando al respecto.

Me anima ver que somos muchos con esta inquietud y que por lo tanto, aunque sea un proceso lento y con dificultades, encuentro ánimos con todos los miembros de este grupo para confiar en Dios Padre y vivir conscientes del  NO TENGÁIS MIEDO, que nos dice JESÚS.

Os pedimos vuestra oración por este grupo que hemos empezado un camino de renovación parroquial.

Gemma M.

Participante en la "Formación en clave de renovación evangelizadora"