En Lleida, el año 1883 nacía Mn. Ramón.

Sacerdote desde 1908, después de estar por poco tiempo adscrito a la parroquia de San Lorenzo, de Lleida, pronto se le concedió un beneficio en la parroquia de San Andrés, de la calle Caballeros.

De salud delicada, le habían aconsejado huir del calor veraniego de la capital. Es por esta razón que iba a Molnars, pueblo de la provincia de Tarragona, donde pasaba el verano en el Mas d’en Pons.

En julio de 1936, encontrándose allí se produjo el alzamiento militar. Las noticias eran alarmantes. Con él, en el mismo lugar, se encontraba Mn Francesc Piñol y decidieron no esconderse, sino dejarlo todo a la voluntad divina. Era el 31 de julio, cuando hombres armados, preguntaron por los sacerdotes de Lleida. Ellos se presentaron. Les hicieron salir de su casa con las manos en la cabeza y obligaron a sus familiares a retirarse. Fue entonces cuando la hermana de Mn. Ramón, allí presente, les dijo: “Haced todo lo que queráis, pero destruir la religión no lo conseguiréis nunca”.

Los dos sacerdote fueron asesinados a pocos metros de la casa. Años después, sus restos fueron trasladados a la Fosa de los Mártires de Lleida, donde descansan con sus compañeros.